La senda de Seaton

Hoy Seaton Park estaba precioso.

Hoy estoy muy contento, por tres cosas.

1ª cosa: hoy he avanzado muchísimo en la tesis; además, por alguna razón, empiezo a tener perspectiva sobre los capítulos, por lo que empiezo a poder ser crítico con ellos. Hoy por primera vez he imprimido el capítulo 2 y lo he mirado por encima (haré una revisión mañana). Jo, qué trabajazo hay ahí. Estoy contento de verlo. Ahora queda terminar los últimos apartados y comenzar a pulirlo. Hoy he trabajado 9 horas seguidas en la tesis.

2ª cosa: ayer me escribieron para proponerme un nuevo proyecto para el curso que viene, en colaboración con otra Universidad. Hay que presentarlo y esperar si se aprueba o no, pero la sola idea de preparar cosas nuevas para el curso que viene me hace mucha ilusión. Ojalá salga. Me encantaría.

Senda en Seaton Park.

3ª cosa: he vuelto a ir a pasear por Seaton Park. Hoy volvía a estar muy nublado y todo el día ha estado amenazando con llover, pero no. Así que, por Ley de Murphy, se iba a esperar a mi paseo. Por eso he pensado que era buena idea no alejarme mucho. Por eso me he dedicado a explorar Seaton Park y he descubierto una senda que lo circunvala y que es de cuento de hadas, mágico total. Así me he dedicado a pasear tranquilo y a hacer fotos. Una señora se ha parado con sus dos perros y me ha dicho hola. Qué maja.
Cuando ya estaba volviendo se ha puesto a llover; luego un poco más, y un poco más... y cuando llegaba a casa era ya un buen chubasco.

Ha sido un día bonito para mí. Sencillo, pero bonito. Lo sencillo cada vez me parece más bonito. Me gustaría que muchos otros días fueran así.